Digitalización y big data en el sector de los cultivos de alto valor: sostenibilidad, rentabilidad y salud

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Fede PerezPulverizadores FEDE (España)

Introducción

El sector agroalimentario está experimentado en los últimos años cambios sin precedentes. Nos encontramos ante a un escenario de incremento constante de la población mundial con la consecuente necesidad de producir más alimentos, pero con una menor disponibilidad de suelo agrícola y bajo la amenaza de la emergencia climática. A su vez, la producción presente y futura de alimentos deberá ser más sostenible, para alcanzar la meta propuesta por la Unión Europea y por España de neutralidad en las emisiones de gases de efecto invernadero en el Horizonte 2050.

Y todo ello con el requisito de la rentabilidad de los agricultores y empresas agrícolas, sin los cuales no existe ni cadena de valor, ni alimentos, ni territorio. Considerando el proceso productivo de la fruta dulce, uno de los inputs de mayor impacto sobre los costes de producción son los productos fitosanitarios aplicados para el control de plagas y enfermedades.

De hecho, estos suponen alrededor del 65% del pack fertilizantes, herbicidas y maquinaria o un 15% del coste total de producción. La experiencia en frutales de las últimas décadas ilustra nítidamente cómo es posible, cambiando la arquitectura de la copa del árbol e innovando en los equipos de pulverización, reducir la deriva en más del 50%. Ante el reto impuesto por la UE en su estrategia “de la granja a la mesa” de reducción drástica de productos fitosanitarios, la combinación de sistemas de formación bidimensionales con copas accesibles a los tratamientos, máquinas y personas, unido a la mejora tecnológica de los equipos de pulverización serán claves y necesarios para alcanzar los objetivos propuestos.

Digitalización y big data en el sector de los cultivos de alto valor: Sostenibilidad, rentabilidad y salud

En el presente artículo se describe la hoja de ruta de la producción de alimentos, los requerimientos impuestos por la Unión Europea en el marco del Green Deal, los requerimientos de los productores y de la sociedad, el procesamiento de datos y la innovación tecnológica en equipos de tratamientos fitosanitarios, todo al servicio de la protección ambiental y de los consumidores.

La hoja de ruta

La hoja de ruta de la próxima década en la agricultura está marcada por el Green Deal. Tras la crisis sanitaria de la covid-19, la estrategia de la Unión Europea pone el foco en el concepto “One Health”, el cual engloba la relación determinante entre medio ambiente, animales y personas como un todo en equilibrio.

La agricultura, como actividad básica, primordial y transversal, se enfrenta al doble reto de incrementar la producción para alimentar a una población mundial creciente, la cual alcanzará 9.7 billones en 2050, y a su vez reducir drásticamente la utilización de recursos. De este modo, con la perspectiva “De la granja a la mesa. Nuestra comida, nuestra salud, nuestro planeta, nuestro futuro” promovida por la UE, la agricultura acelerará su transformación digital y transición del modelo productivo.

El sector agrícola implementará los avances más punteros del mundo de las telecomunicaciones (Inteligencia Artificial, GPS, métodos de predicción…). Así, el campo se caracterizará de forma unitaria por la precisión, eficiencia y control requeridos para conseguir los objetivos de una agricultura sostenible que reduzca su impacto ambiental siendo una actividad rentable para el sector y que proporcione los alimentos saludables necesarios a precios asequibles para la sociedad.

Digitalización y big data en el sector de los cultivos de alto valor: Sostenibilidad, rentabilidad y salud

Reducción del 50% del uso de pesticidas

Los pesticidas utilizados en la agricultura contribuyen a la polución de suelo, agua y aire. Asimismo, tienen una gran repercusión directa en los costes de las empresas agrícolas y en la inocuidad de los alimentos. Por ello, la meta del Green Deal para 2030 es la reducción del uso de pesticidas en un 50%.

Pulverizadores Fede, referente internacional en protección de cultivos de alto valor (cítricos, frutales, viña, olivo, almendro…)  encabeza las reducciones en uso de pesticidas ya que con la tecnología H3O incorporada por los atomizadores y nebulizadores ya consigue disminuciones de hasta el 25%. Esta reducción, además de reducir el impacto ambiental de la pulverización, protege la biodiversidad ya que permite realizar tratamientos que respetan la vida de las abejas, un valor indispensable y fundamental de la agricultura que se encuentra en grave peligro.

A la reducción del uso de pesticidas se suma la disminución de la emisión de gases de efecto invernadero derivados de la reducción de hasta 4l/h en el uso de combustible y la eficiencia del trabajo en relación a horas de tratamientos y optimización de los mismos para evitar repeticiones.

En este sentido, los resultados de los ensayos con la tecnología H3O en plantaciones de Viñas del Vero realizados en el marco del proyecto LIFE-F3, del prestigioso programa LIFE de la UE, confirman un ahorro del 30% en el coste de los tratamientos. Este importante ahorro se basa en la eficiencia ya que se debe tanto a la reducción de la cantidad de producto fitosanitario aplicado en los tratamientos como al incremento de rendimiento del trabajo en un 17%.

Digitalización y big data en el sector de los cultivos de alto valor: Sostenibilidad, rentabilidad y salud

Los desarrollos actuales de Pulverizadores Fede están enfocados a la consecución de la reducción del 50% en el uso de pesticidas para cumplir con los exigentes objetivos del Green Deal, así como impulsar los logros en el contexto de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, en los cuales la tecnología H3O se enmarca dentro de los medios de producción sostenibles avalados por el Sello Efficient Solution.

Exigencia del consumidor consciente

Los consumidores han tomado conciencia tanto del medio ambiente como del valor de la inocuidad de los alimentos. Por ello, demandan saber para escoger las frutas y verduras que se han cultivado de manera sostenible, que cumplen con todas las garantías de seguridad agroalimentaria y que pueden adquirir a un precio asequible.

Para dar respuesta a esta demanda del consumidor, las soluciones de Pulverizadores Fede proporcionan trazabilidad real de los tratamientos realizados con información detallada y exacta. De este modo, los productores que trabajan con la tecnología H3O ya rentabilizan dicha trazabilidad como garantía de seguridad alimentaria y respeto al medio ambiente, teniendo la opción de facilitar dicha información a las cadenas de distribución y pudiendo ponerla también a disposición del consumidor final.

Sostenibilidad rentable como nuevo modelo de negocio de la agricultura

Las soluciones tecnológicas de Pulverizadores Fede engloban tanto los avanzados equipos de protección de cultivos de alto valor como la Specialty Crops Platform (SCP) y el dispositivo SCG (Specialty Crops Gateway), herramientas digitales de gestión agronómica.

Digitalización y big data en el sector de los cultivos de alto valor: Sostenibilidad, rentabilidad y salud

Dichas soluciones facilitan una completa transformación digital del campo: planificación, configuración de órdenes de trabajo y su ejecución. Asimismo, toda la información del campo queda recopilada y almacenada para su posterior análisis, por lo que permite tomar mejores decisiones tanto agronómicas como empresariales basadas en datos.

Actualmente, importantes plantaciones de cultivos de alto valor y líderes en producción sostenible a nivel mundial ya han adoptado la tecnología H3O de Pulverizadores Fede, como por ejemplo Frutas Bollo, Llusar, Lucato, Bodegas González Byass, Bodegas Matarromera, entre otras.

Big data: el valor económico y agronómico de los datos propios

Los datos recogidos en campo, su integración y cruce con otra información relevante son el multiplicador de la utilidad y beneficio de las tecnologías digitales de precisión. El concepto big data es el que define el valor de los datos para las empresas agrícolas, gracias a los cuales tienen la capacidad de tomar decisiones agronómicas y de gestión certeras basadas en la información de su trabajo en campo y de las necesidades reales de sus cultivos.

El análisis de estos datos, recogidos durante el trabajo en campo en combinación con los relativos al estado de las plantaciones y las previsiones meteorológicas, facilitarán la anticipación en la toma de decisiones críticas y una gestión transversal de los aspectos agronómicos que tendrán su reflejo en el incremento de la rentabilidad de las empresas agrícolas.

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